Hola, gente querida.
Hoy compartimos una síntesis del artículo escrito por Laura Dattaro para Spectrum New sobre resultados de estudios realizados durante varios años sobre la eficacia de las evaluaciones en autismo realizadas a distancia. Resultado: podrían ser positivos respecto de otras estrategias.
La pandemia de COVID 19 fue oportunidad tanto para probar la estrategia de las evaluaciones a distancia en autismo, vía internet, como para estudiarla. También para explorar si esta estrategia permitiría por un lado ampliar la cobertura, por ejemplo a áreas rurales, y por otro disminuir las barreras para el acceso y también los tiempos de espera para acceder a esos servicios.
“Hay un porcentaje considerable de niños y niñas pequeños en el espectro en el que podremos confirmar con precisión la presencia de perfiles de autismo basados en visitas de telesalud”, dice Warren, director de investigación de autismo en Vanderbilt. “No hay duda de que ese es el caso”. Ahora se intenta saber cómo mejorar estos servicios.
Es probable, de todos modos, que las evaluaciones virtuales sigan siendo en última instancia parte de un enfoque múltiple para el diagnóstico. “No es que la evaluación vaya a ser completamente de telesalud para todos los niños y niñas”, dice Elizabeth Kryszak, psicóloga de un hospital pediátrico Nacional de Ohio. Pero "creo que suficientes grupos han progresado lo suficiente como para que esto no desaparezca".
La siguiente pregunta importante que enfrentan los investigadores es para quién funciona el diagnóstico remoto y quién se beneficiaría de una evaluación en persona. Ya se tienen algunas pistas: por ejemplo, niños y niñas en quienes el autismo se da junto con alguna cuestión de comportamiento concurrente o las personas sin habla son más difíciles de evaluar a distancia, dice Katherine Stavropoulos, profesora asociada de la Universidad de California Riversdale. Más evidencia podría ayudar a garantizar que cualquier persona o familia pueda acceder a los servicios de autismo, independientemente de su nivel socioeconómico. “Creo firmemente en cualquier investigación que podamos hacer para acercar las cosas a ese ideal”, dice ella. “Y creo que la telesalud puede hacer eso”.
Al artículo original: https://doi.org/10.53053/JWZR8142